Desde nuestra entidad queremos compartir las principales reflexiones surgidas durante la II Jornada de Prevención en Salud Mental, La Familia, primera red de apoyo en la Salud Mental de los aolescentes., un espacio de diálogo y aprendizaje que reunió a profesionales, familias y agentes sociales para abordar los retos actuales en la protección del bienestar emocional de adolescentes y jóvenes.

1. La familia como primera red de apoyo

Se reafirmó el papel fundamental del entorno familiar en la detección temprana de dificultades psicológicas y en la promoción de habilidades para afrontar el estrés, la ansiedad y los desafíos propios de la adolescencia. Un hogar seguro, comunicativo y emocionalmente disponible es clave para prevenir riesgos.

2. Factores protectores y de riesgo

Entre los factores protectores identificados destacan el apoyo emocional, la comunicación abierta, modelos de conducta saludables, expectativas realistas y vínculos afectivos sólidos. Por el contrario, el conflicto familiar, la sobreprotección, la falta de comunicación y las expectativas excesivas se señalaron como riesgos que pueden afectar el bienestar juvenil. Fortalecer lo positivo y reducir lo negativo es una prioridad.

3. Entornos seguros y educación digital

Se subrayó la necesidad de crear espacios seguros, tanto físicos como emocionales, en un contexto donde redes sociales y futuro generan incertidumbre. Las amistades sanas, el uso responsable de la tecnología y la supervisión adulta son esenciales. Además, se destacó la importancia de educar en competencias digitales y en el uso crítico de internet para reducir ansiedad, aislamiento y baja autoestima.

4. Apoyo a las familias

Un aspecto relevante fue la creciente sensación de desbordamiento en progenitores ante las exigencias sociales y digitales. Cuando los adolescentes perciben esta saturación, pueden experimentar inseguridad emocional y dificultades en la regulación afectiva. Por ello, se propone reforzar el acompañamiento a las familias, fomentar modelos saludables y mejorar la comunicación interna.

En conclusión, la jornada evidenció que la prevención en salud mental requiere un enfoque integral que incluya a familias, centros educativos y comunidad. Apostar por la educación emocional, la comunicación y el apoyo mutuo es la mejor estrategia para construir entornos protectores y resilientes.

Esta jornada ha sido posible garacia a la colaboración del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús y el patrocion de Johnson & Johnson.